De los 2.100 centros educativos registrados en Andalucía, más de 1.500 cuentan con un espacio dedicado al huerto en cualquiera de sus modalidades ( tradicionales, en bancales, macetohuertos, mesas de cultivo, etc.). Dado el interés creciente de esta actividad en Andalucía, un año más AGAPA ha colaborado con la Consejería de Desarrollo Educativo y Formación Profesional de la Junta de Andalucía en el diseño e impartición del curso online “La aventura de nuestro ecohuerto” como apoyo al profesorado que los gestiona o tenga la intención de ponerlo en marcha en su centro educativo.
En esta edición, destaca la participación de más de 200 docentes seleccionados entre un total de 619 solicitudes procedentes de los niveles de Infantil, Primaria y Secundaria. Con esta cifra, el número total de docentes formados en Andalucía a lo largo de las cinco ediciones del programa se aproxima ya al millar. Los materiales, diseñados especialmente para que sean sencillos y prácticos, proceden del Proyecto Ecológico Andalhuerto. Se trata de una iniciativa que utiliza el huerto como una herramienta didáctica novedosa que permite que personas que no están familiarizadas con la actividad agraria puedan diseñar e instalar un huerto en su centro educativo y disfrutarlo con su alumnado, implementando técnicas adaptadas al cambio climático. En los más de 10 años de experiencia en este proyecto se evidencia que instalar y gestionar un huerto fomenta el contacto con la naturaleza y el conocimiento de los alimentos ecológicos. Además, facilita el aprendizaje de las materias curriculares de una forma divertida y amena, y fomenta la cooperación, la observación y la responsabilidad con el objetivo común del cuidado del huerto.
La participación activa y propositiva del alumnado del curso online ha supuesto un aliciente añadido al curso, ya que se han compartido experiencias y saberes locales que han servido de guía al grupo en general, según se ha expresado en los distintos foros. Esto ha permitido la interacción entre centros de diferentes puntos de la geografía andaluza con propuestas e ideas que han servido para solucionar problemas comunes en lugares diferentes, además de animar a las personas más noveles en este maravilloso mundo del ecohuerto.
Aspectos como la construcción de un hotel de insectos cerca de otros elementos como macetas con flores o charcas de agua, hacen que aumente la biodiversidad del entorno, algo que muchos centros han compartido porque ya lo han implementado. Ha resultado muy interesante comprobar cómo el alumnado de distintas edades ha colaborado en la construcción de varios tipos de refugios de insectos, lo que ha servido de excusa para conocer un poco más de cerca a estos pequeños aliados del huerto, conocer su función biológica y el lugar donde se ubicarán en el hotel.
El curso también ha servido de impulso para que se elaboren algunos compuestos caseros para el botiquín verde del huerto, mostrando que con ingredientes caseros y disponibles en cualquier casa, podemos prevenir y combatir enfermedades y plagas del huerto. Así, podemos hacer infusiones de ajo y leche o elaborar purín de ortiga como insecticidas o fungicidas, o decocción de cola de caballo como fungicida, o simplemente utilizar jabón potásico diluido en agua para combatir el pulgón o la mosca blanca….
Como aspectos novedosos en algún foro se ha hablado de la influencia de la luna en los cultivos, aportando materiales de consulta interesantes, o de las ventajas de que tanto el alumnado como el profesorado conozcan a personas hortelanas locales que acudan al centro escolar para poner en valor el trabajo que hacen en su día a día y que a menudo pasa desapercibido.
La introducción de árboles frutales también ha sido compartido en el curso como un paso más en el desarrollo del huerto. Por otro lado en el curso comprobamos que la actividad de extracción de semillas es una de las más populares entre el alumnado, siendo los tomates, los pimientos y las calabazas los frutos más utilizados. Otros centros además, aprovechan el huerto para adecuar el espacio como área de descanso y disfrute, equipándolo con mesas y asientos que inviten al aprendizaje al aire libre.
Como vemos, el mundo del huerto es diverso, apasionante y adaptable a las posibilidades de cada centro. Formarse en técnicas agrícolas novedosas y sencillas adaptadas al cambio climático es una oportunidad para seguir aprendiendo e innovando.
Esperamos que el próximo curso escolar comience con nuevas ilusiones, y que una de ellas sea ¡MONTAR TU PROPIO ECOHUERTO!
La planificación del huerto al inicio del curso escolar es una tarea imprescindible para un buen desarrollo del mismo.
Toda la información utilizada en el curso se puede consultar en el Manual para Infantil y Primaria, pulsando aquí:
Si quieres conocer dónde se ubican otros huertos escolares, consulta nuestro mapa.
Lo que diferencia el tipo de prácticas y trucos que ofrece este curso con respecto a otras técnicas tradicionales agrícolas es que están adaptadas al cambio climático, por lo que el aprendizaje es doble: se acercan los productos de la huerta tanto al alumnado como al profesorado, y a la vez, se sensibiliza sobre los efectos del cambio climático, ya que se comparten técnicas que fomentan el equilibrio natural en un espacio cultivado, lo que permite ahorrar tiempo y recursos a medio plazo (no olvidemos que el tiempo de dedicación al huerto suele ser uno de los hándicaps para las personas que se ocupan del mismo).
