Un estanque, charca o depósito de agua al aire libre nos puede proporcionar muchas ventajas. Muchos animales de una forma directa se alimentarían de las plagas de la huerta, entre otras ventajas.
¿Qué es un estanque o balsa?
Si nos ceñimos a la definición de la Real Academia Española (RAE), un estanque es una balsa construida para recoger el agua, con fines utilitarios, como proveer al riego, criar peces, etc., o meramente ornamentales.
Desde el punto de vista de la agroecología, un estanque es un elemento auxiliar (https://www.andalhuerto.es/el-huerto/elementos-auxiliares-del-huerto/) que podemos implementar en una zona del huerto escolar o en las zonas comunes de los huertos urbanos, de forma que salgan beneficiadas todas las personas que conforman la comunidad educativa o las personas que son parte integrante de los huertos sociales.
¿Por qué construir un estanque en los huertos ecológicos?
Desde el Proyecto Ecológico Andalhuerto os animamos a crear un estanque, ya que con ello estamos atrayendo la fauna auxiliar y favorecemos que se establezcan en nuestra zona de cultivo. Esta fauna es muy beneficiosa por varias razones, como por ejemplo, nos ayudará a mantener el equilibrio en nuestro ecosistema, nos ayudará a controlar las plagas y las enfermedades, y como consecuencia no tendremos que emplear productos fitosanitarios.
Por otro lado, con el establecimiento de un estanque estamos creando biodiversidad (https://www.andalhuerto.es/el-huerto/elementos-auxiliares-del-huerto/la-biodiversidad-como-aliada/), ya que sirve de refugio y de alimento a muchos seres vivos que cumplen su función dentro de nuestro ecosistema, además de facilitar un lugar tranquilo donde poder reproducirse.
Los estanques aportan una zona para que puedan beber determinados insectos muy beneficiosos para nuestra huerta (abejas, avispas, mariquitas, etc) y se crean zonas húmedas para que los anfibios como ranas (que se alimentan de insectos, orugas, gusanos, etc) y sapos, que se alimentan de hormigas, mosquitos, polillas, caracoles y pequeños roedores.
También favorecemos que los pájaros se instalen en nuestros huertos ya que vienen a beber y a alimentarse, entre ellos algunas especies insectívoras, y colaborarán a mantener determinadas plagas bajo control.
¿Cómo construir un estanque en nuestros huertos?
En primer lugar, es importante decidir dónde se va a ubicar el estanque en el huerto. Os recomendamos que sea un sitio soleado, pero con una zona de sombra. No ponerlo debajo de frutales, ni de árboles que suelte demasiadas hojas.
Una vez que tengamos localizado el lugar donde vamos a situar el estanque, procederemos a realizar un agujero en el suelo con las herramientas que dispongamos en nuestro huerto, ya sea una pala, azada, pico, etc.
A continuación, antes de colocar el plástico, es conveniente poner una capa que impida que piedras o raíces no rompan el plástico del embalse. Puede ser de acolchado vegetal, como paja o barro, o una lámina impermeable como una alfombra o una malla geotextil.
Posteriormente, se instala el plástico impermeable al aire y al agua y resistente a los rayos solares, que podemos encontrar en ferreterías o tiendas especializadas, y que ofrecen bastante durabilidad y estanqueidad. Esta parte del proceso de creación es muy importante, y hay que tener paciencia, porque se debe colocar cuidadosamente para que no se escape el agua. Necesitaremos piedras de distintos tamaños para ir poniéndolas en los bordes del embalse y encima del plástico.
Por último, procedemos al llenado del estanque con agua e iremos trasplantando todas las especies de plantas acuáticas que hayamos decidido instalar en él.
¿Qué plantas acuáticas podemos colocar en nuestro estanque?
Existe diversidad de plantas acuáticas como son las plantas flotantes (lentejas de agua, cola de zorro, etc.), que sirven para cubrir la superficie del estanque, haciendo que la incidencia solar sea menor, y compitiendo con las algas que salgan en el estanque. Además, este tipo de plantas oxigenan el agua y sirven de alimento y de cobijo para la fauna beneficiosa.
Por otro lado, tenemos las plantas de ribera o de orilla (cola de caballo, juncos, etc), que generan zonas de sombras que sirvan de refugio de los anfibios y la fauna auxiliar e impiden la proliferación de algas consumidoras de oxígeno del agua.
Por último, existen las plantas de aguas profundas como el nenúfar o la flor de loto que evitan la aparición de algas en el embalse, ya que son plantas que con sus raíces oxigenan el agua. Se suelen colocar en el centro del estanque.
Como última recomendación, es interesante la instalación de una bomba de agua, que mantenga el agua en movimiento. Estas pueden ser solares, con el consiguiente ahorro energético, y con filtros para mantener el agua libre de determinadas impurezas, es importante que se dimensione correctamente en base al volumen de agua del estanque.
Documentación recomendada
Estos artículos que a continuación enlazamos están relacionados con la propuesta de incluir un estanque en el huerto.
Además en este vídeo os contamos paso a paso como construir un estanque.
Y por último si quieren saber más sobre fauna auxiliar os recomendamos que echéis un vistazo al blog «fauna auxiliar».
