Durante el mes de enero, tras las navidades, continuamos con las actividades en los Huertos Demostrativos del Proyecto Ecológico Andalhuerto.

Este mes sirve de tránsito entre el letargo del invierno y los preparativos de primavera-verano. Por lo tanto es hora de ir pensando en la planificación de los próximos cultivos, y para ello es imprescidible organizar el banco de semillas. Hemos eliminado las semillas viejas de cultivos de verano que llevan almacenadas más de 3 años y hemos seleccionado las que sembraremos la próxima temporada. Nos hemos enfocado especialmente en aquellas que llevan almacenadas entre 2 y 3 años, así como en semillas que adquirimos en la actividad de intercambiado que tuvo lugar durante el V Encuentro de Huertos Sociales de Andalucía. A partir de febrero empezaremos la elaboración de los semilleros.

También hemos dado un repaso de escarda manual a todo el huerto y con desbrozadora por los alrededores. Los restos los hemos utilizado, como hacemos ya desde octubre, para acolchar la nueva plantación del bosque de alimentos y, así, contribuir a la mejora del suelo del mismo. Poco a poco este acolchado se irá ampliando con el objetivo de que el bosque de alimentos esté completamente cubierto de restos orgánicos y crear una superficie de mantillo natural. Cabe decir que la palabra mantillo es original de la cubierta natural que se forma en el horizonte superior del suelo, producto de la descomposición parcial o total de materias orgánicas, como sucede en los bosques cubiertos de hojas. Y esto es lo que queremos ir recreando.

Acolchado de la higuera del bosque de alimentos con resto de escada

Otra tarea que realizamos fue la siembra de ajos para obtener ajetes tiernos en primavera (teníamos unos ajos que queríamos poner en otoño pero no pudimos por falta de tiempo y habían empezado a brotar). Para ello, retiramos el acolchado de paja y los tubos de riego, abrimos un surco de unos 15 cm, colocamos las cabezas de ajo, tapamos de nuevo el surco conformando un pequeño lomo para aumentar más si cabe la profundidad (esto hará que los ajetes tengan un cuello blanco más largo) y colocamos de nuevo los tubos de riego y el acolchado.

Además hemos aprovechado que hace frío para hacer ejercicio y dar la vuelta a dos de nuestros montones de compost. Uno de restos de poda mediana que va descomponiendo lentamente y al ser un montón libre, simplemente lo hemos volteado hacia una lado. Y el otro montón es uno de los que tenemos dentro de los contenedores de palets. Éste lo hemos sacado afuera y vuelto a colocar dentro, por lo que en realidad se ha volteado dos veces, mejorando asi la homogeneización. Como estaba bastante seco, ya que contenía muchos restos de paja, hemos ido recolocando capas de unos 10 cm y regando. En febrero voltearemos el tercero de nuestro montones que está en el otro contenedor de palets.

Volteando el montón de compost

Publicaciones Similares