Entrevista realizada a Juana García Cárdenas, que desde el curso 2021/22 tiene su destino definitivo en el IES Las Fuentezuelas de la ciudad de Jaén donde al llegar se hizo cargo del incipiente huerto escolar, desarrollando todo su potencial como herramienta educativa en el marco del Programa Aldea junto con un equipo de profesorado del centro muy motivado por el proyecto, aprovechando los recursos que tiene este centro en relación a espacios exteriores.

Es licenciada en Biología y Geología por la Universidad de Granada. Desde el año 1997 ejerce como profesora de Biología y Geología, y a partir de 2004 ha sido coordinadora del Programa de Innovación Educativa Aldea B (denominado en sus inicios “Crece con tu Árbol”) en los centros donde ha impartido docencia. Además, es miembro de Escuelas Andaluzas por el Clima, un proyecto para la educación ambiental en el que participan docentes de toda Andalucía preocupados por el cuidado y la protección de nuestro entorno y por la situación actual de emergencia climática. A través del huerto escolar trabaja con el alumnado promoviendo iniciativas en la búsqueda de soluciones que den respuesta a esta grave problemática.

1. DESCRIPCIÓN DEL CENTRO

El IES Las Fuentezuelas se sitúa en la zona oeste de la ciudad de Jaén, en la Avenida de Arjona nº 5. Presenta un gran abanico de enseñanzas educativas. Entre ellas Educación Secundaria Obligatoria (ESO), Bachillerato (Ciencias y Tecnología, Humanidades y Ciencias Sociales), Ciclo Formativo de Grado Básico de Servicios Administrativos, Formación Profesional Básica Específica de Auxiliar de Servicios Administrativos, varios Ciclos Formativos de Grado Medio, y una amplia oferta de Ciclos Formativos de Grado Superior, entre ellos el de Mecatrónica Industrial, y un par de Cursos de Especialización en Formación Profesional.

El Programa Aldea B se viene desarrollando en el centro desde el año 2012 con Ecohuerto y Recapacicla, aunque en la actualidad, se han ampliado las líneas de intervención. Es a partir del curso 2020/21, cuando se da un gran impulso al programa con la puesta en marcha del huerto escolar. La zona de huerto fue rediseñada en el curso 2021/22 y se dieron los primeros pasos para destinar el espacio colindante al diseño de un aula de la naturaleza quedando enmarcado el huerto escolar en un gran espacio de trabajo, estudio e investigación para nuestro alumnado.

Nuestro centro presenta, dentro de sus fortalezas una gran cantidad de espacios que propician el contacto directo con la naturaleza favoreciendo la observación, la investigación y la elaboración de pequeños proyectos donde el alumnado experimente la conexión con la naturaleza haciendo posible multitud de experiencias complejas y significativas.

Es destacable la peculiar estructura de nuestro centro distribuida en cinco edificios, donde se ubican las aulas ordinarias; además, de la existencia de varios talleres, dedicados a Electricidad y a Instalación y Mantenimiento, así como un gimnasio, un pabellón cubierto y dos pistas deportivas descubiertas. Todos estos edificios están rodeados por una zona ajardinada que cubre una extensa superficie. En consecuencia, el centro abarca un perímetro de 673,35 m, vallado en su totalidad, y una superficie total de 19.177 m2.

El IES las Fuentezuelas dispone de un entorno ideal para el huerto

Este enclave especial da a nuestro centro un atractivo único para acondicionar espacios donde se integran de forma efectiva actividades pedagógicas y curriculares con efectos positivos en el desarrollo físico, mental y social de nuestro alumnado, favoreciendo la adquisición de habilidades en Educación Ambiental, Desarrollo Sostenible y valores esenciales para la vida en sociedad y el desarrollo personal.

2. DESCRIPCIÓN DE LA ZONA DE HUERTO

El huerto se creó hace 4 años en la zona trasera del pabellón de Educación Física donde se acumulaba mobiliario en desuso. En esta superficie se fue habilitando un huerto tradicional y un mini invernadero. A raíz de esta nueva experiencia en el curso 2022/23 surgió el desarrollo de un Proyecto de Innovación Educativa denominado “Abriendo puertas a la naturaleza” de 2 años de duración. En este marco se está habilitando el aula de la naturaleza en el recinto donde queda ubicado el huerto tradicional, mini invernadero, zona de semillero, zona de investigación, compostera, estación meteorológica y creación de un huerto vertical, con espacio de lectura dotada de asientos realizados a base de palets y el diseño de jardineras con neumáticos reutilizados.

El espacio cuenta con la presencia de plantas aromáticas y frutales, y con zonas de elaboración de compost, semilleros y de reutilización de materiales con transformación de los mismos. Para el huerto hemos utilizado zonas que no tenían ningún uso y donde se almacenaba el material:

Tras toda una labor de transformación hemos conseguido contar con un aula al aire libre, donde el alumnado aprende, experimenta y propone soluciones y actuaciones para la mejora del medio ambiente. Te mostramos diferentes zonas de cultivo y hortalizas que obtenemos en el huerto:

3. CONEXIÓN DE LAS MATERIAS CURRICULARES CON EL HUERTO

Hay todo un despliegue de trabajo alrededor del huerto escolar. A través de todas las actuaciones que desarrollamos hemos conseguido sacar adelante un mini proyecto de economía circular. Actualmente somos capaces de autoabastecernos sin necesidad de incorporar demasiados agentes externos en aspectos como la producción de semillas o generación de plantones o abonos a través de compostaje. Con esto contribuimos a la reducción de emisiones de gases, ya que los productos que van creciendo son destinados al alumnado que los va plantando, cuidando y recolectando. De esta forma, se conciencian en la importancia de producir nuestro propio alimento sin la necesidad de comprar productos del exterior reduciendo así la huella de carbono.

Desde cada una de las materias, se realiza una selección de los objetivos relacionados con criterios de evaluación, contenidos y competencias enlazándolas a los Objetivos de Educación Ambiental y tratando los Objetivos de Desarrollo Sostenible (ODS) tal y como marca la LOMLOE, actual Ley Orgánica de Educación que regula el sistema educativo español. Estos objetivos se desarrollan completamente integrados en la práctica docente y nos sirven como base de diseño de Situaciones de Aprendizaje y las Unidades Didácticas Integradas que el profesorado va elaborando, además de su vinculación con los planes y programas educativos desarrollados en el centro.

Las materias que nos resultan más fáciles de integrar en el huerto son las matemáticas, lengua, educación física, biología y geología y la educación plástica, junto a algunos módulos de ciclos formativos, como la informática (para divulgar las actividades que se realizan en torno al huerto y que implican elaboración de vídeos y cartelería) o el ciclo de mantenimiento (para construcción de herramientas o nuevos utensilios para el huerto a partir de materiales reciclados). Entre las materias que nos resultan más complicadas de integrar, vemos el currículo de filosofía de difícil aplicación al huerto escolar.

Entre los objetivos por materias podemos definir algunos como:

  • Educación Física: valorar la riqueza del entorno natural de nuestro centro educativo, así como la necesidad de su cuidado y conservación a través del uso y disfrute de estas áreas mediante la práctica de gran variedad de actividades físicas en estas zonas.
  • Biología y Geología: conocer y valorar las interacciones de la ciencia con la sociedad y el medio ambiente, con atención particular a los problemas a los que se enfrenta hoy la humanidad y la necesidad de búsqueda y aplicación de soluciones, sujetas al principio de precaución, para avanzar hacia un futuro sostenible. Estudios de la huella de carbono, economía circular, importancia del agua en el planeta, estudio del clima a través de la estación meteorológica. Ciclo de vida de las plantas, etc.
  • Educación Plástica y Visual: transformar materiales, decorar y pintar algunas paredes del huerto. Diseño del logotipo para el Programa Aldea y de los planos de la zona del huerto escolar y del aula de la naturaleza.
  • Física y Química: elaboración de productos naturales para el control de plagas, estudio del suelo y mejores zonas de cultivo según la calidad y riqueza del terreno.
  • Geografía e Historia: situar en el espacio, conocer y clasificar los elementos constitutivos del medio físico andaluz, español, europeo y del resto del mundo, comprendiendo las conexiones existentes entre estos y la humanización del paisaje y analizando las consecuencias políticas, socioeconómicas, medioambientales que esta tiene en la gestión de los recursos y concienciando sobre la necesidad de la conservación del medio natural.
  • Lengua Castellana y Literatura: utilizar la lengua para expresarse de forma coherente y adecuada en los diversos contextos con la elaboración de recetas elaboradas con los productos recolectados en ele huerto, creación de diario del huerto, recursos producidos por el alumnado con cartelería para dar publicidad a las actividades desarrolladas en el huerto, etc.
  • Matemáticas: integrar la materia de matemáticas en actividades del huerto escolar es una de las tareas más sencillas que el profesorado puede abarcar valorando las matemáticas como parte integrante de la cultura andaluza, tanto desde el punto de vista histórico como desde la perspectiva de su papel en la sociedad actual. Aplicar las competencias matemáticas adquiridas para analizar y valorar fenómenos sociales como la diversidad cultural, el cuidado de los seres vivos y el medio ambiente, la salud, el consumo, el reconocimiento de la contribución de ambos sexos al desarrollo de nuestra sociedad y al conocimiento matemático acumulado por la humanidad, la aportación al crecimiento económico desde principios y modelos de desarrollo sostenible y utilidad social o convivencia pacífica.
  • Música: valorar el silencio y el sonido como parte integral del medio ambiente y de la música, tomando conciencia de los problemas creados por la contaminación acústica y sus consecuencias.
  • Tecnología: resolución de problemas técnicos como la instalación del riego por goteo o el próximo proyecto de diseño de un depósito de recogida de agua de lluvia recolectada del tejado del pabellón de educación física.

4. COMUNIDAD INVOLUCRADA EN EL HUERTO

En la gestión del huerto participa principalmente el alumnado de Bachillerato de la materia de Ciencias de la Tierra y del Medio Ambiente junto con el alumnado de la materia de Biología y Geología de la ESO. También contamos con la colaboración inestimable del alumnado del Ciclo Superior de Mecatrónica Industrial, que participan activamente en la transformación de materiales reutilizados que utilizamos en el huerto escolar o en los espacios del aula de la naturaleza, y con el alumnado del Programa de Diversificación Curricular-PDC de la actual LOMLOE (anteriormente PMAR) y de Geografía e Historia, que contribuyen a la fabricación de mini invernaderos o semilleros con materiales reciclados. Al final de cada temporada de cultivo el alumnado se lleva las verduras del huerto a casa y de esta forma fomentamos hábitos de vida saludable.

Nos resultan de vital importancia los aprendizajes y experiencias transmitidos por familiares directos de nuestro alumnado durante el día a día del trabajo de huerto.

Juana García, coordinadora del Programa Aldea, se encarga de la distribución de tareas y organización del huerto y del aula de la naturaleza. Esta es una tarea que realiza conjuntamente con el equipo de profesorado que coordina otros planes y programas que constituyen el Equipo Aldea del IES Las Fuentezuela, con el apoyo inestimable del Equipo Directivo dando vía verde a las propuestas que se van realizando.

Un objetivo a alcanzar es lograr una mayor implicación de otros sectores como pueden ser la Asociación de Madres y Padres (AMPA) que va a retomar su actividad en el curso 2023/24, lo que puede ser una buena línea de integración y participación activa de las familias en las actividades del huerto escolar.

5. SOBRE LAS TÉCNICAS

Para el manejo del huerto utilizamos los recursos didácticos que facilita Andalhuerto. En cuanto a las semillas, sembramos las que provienen de los huertos particulares de nuestro alumnado ubicados en las proximidades del centro. La semilla es de procedencia local y con ello se pretende contribuir a la disminución de las de emisiones de dióxido de carbono y la reducción de la huella de carbono como objetivo principal de todas las labores que se desarrollan a través del huerto escolar.

Tenemos dos periodos de siembra: uno para las verduras de invierno en el mini invernadero en los meses de octubre-noviembre, con acelgas, brócolis, cebolletas o diferentes variedades de lechugas, y otro para las verduras de verano en el mes de marzo-abril, con tomates, pimientos, berenjenas y pepinos.

Para reducir la presencia de enemigos en el huerto contamos con con plantas aromáticas en zonas próximas al huerto, entre las que destacamos el romero, que sirven de refugio y fuente de alimento para los insectos polinizadores o depredadores, reduciendo así, en la medida de lo posible, las plagas en las hortalizas del huerto.

Como dotación, a finales del curso 2022/23, recibimos un kit de vivero forestal del Programa de Sensibilización Ecológica y Educación para la Sostenibilidad sobre “Ecosistemas Forestales y Flora Silvestre” en el ámbito de Andalucía Oriental. Por tanto con este material iniciamos el nuevo curso, siendo nuestro objetivo crear un vivero forestal para mejorar las zonas verdes del centro y realizar la instalación del riego por goteo que aún tenemos pendiente.

El kit forestal nos va a permitir instalar el riego por goteo

6. AUTOSUFICIENCIA

Como hemos apuntado anteriormente pretendemos que nuestro huerto escolar sea autosuficiente y tendemos hacia un modelo de economía circular. De manera habitual, el alumnado que participa en el proyecto del huerto escolar, aporta semillas procedentes de algunos huertos particulares y realizan la selección de los mejores productos para continuar con la extracción y secado de semillas.

En los dos últimos cursos hemos elaborado un importante banco de semillas de algunas hortalizas de producción propia con las que pretendemos realizar trueque con hortelanos conocidos que ya nos aportaron semillas o plantones en cursos pasados.

Como disponemos de gran cantidad de vegetación, el jardinero del centro deposita los restos de poda en la zona de nuestra aula de la naturaleza en un punto alejado del huerto y del que poco a poco vamos extrayendo el material orgánico para ir enriqueciendo el suelo.

Además, cada inicio de curso, aramos la tierra y vamos dejando los restos orgánicos de las hortalizas mezcladas con el suelo enriqueciendo el terreno sin necesidad de aportes externos.

En nuestro afán de reciclar, recopilamos materiales desechados por los diferentes departamentos didácticos del centro y les damos una segunda vida, como por ejemplo el uso de los viejos potros de Educación Física que nos han servido como soporte a nuestra estación meteorológica, o las espalderas del gimnasio que han sido desmontadas y se van a rediseñar para la construcción del cercado de la zona de semilleros.

7. DESTINO DE LA COSECHA

La cosecha obtenida de nuestro huerto se reparte entre el alumnado que cuida el huerto y con estos productos realizan recetas variadas que posteriormente se difunden a través del centro para potenciar hábitos de vida saludable entre la comunidad educativa.

Además se recoge la producción de aceituna de dos olivos que tenemos en la zona de huerto y se elabora una receta tradicional.

8. CONEXIÓN CON OTROS CENTROS O ENTIDADES

Hemos abierto una línea de actuación con la Universidad de Jaén donde nos sumamos al Proyecto MOST que propone una idea poderosa de “Escuela Abierta”. Este proyecto abre la educación científica formal, y establece vínculos entre la escuela y sus comunidades para trabajar conjuntamente proyectos educativos ambientales que es justamente lo que pretendemos con el huerto escolar y con el Proyecto de Innovación Educativa “Abriendo puertas a la Naturaleza”.

Todas nuestras acciones en torno al huerto escolar van dirigidas hacia el mismo sentido y pretenden que nuestra comunidad educativa evolucione hacia un centro más sostenible, de ahí el título bajo el cuál las agrupamos: “Caminando hacia la Sostenibilidad”.

Es por todo ello que, como docentes, tenemos mucho en lo que podemos contribuir como sociedad y vemos que es más necesaria la Educación Ambiental como proceso de análisis, de reflexión, de construcción del conocimiento y respeto a todo lo que nos rodea poniendo la vista en nuestro entorno más próximo y en el huerto escolar.

Pretendemos que nuestro alumnado y toda la comunidad educativa, estén conectados al entorno en el que se ubica el huerto, fomentando su dinamización, aumentando la participación, la interacción y la convivencia democrática por lo que desde esta concepción de la Educación Ambiental podemos contribuir logrando un planeta más resiliente y todo ello, desarrollado a través de tres ejes fundamentales de trabajo como son: Cambio Climático, Desarrollo Sostenible y Ámbito Ecosocial, líneas de trabajo que constituyen nuestro punto de partida para trabajar a través del huerto escolar.

9. LA IMPORTANCIA DE CONTAR CON UN HUERTO ESCOLAR EN EL CENTRO

El desarrollo del huerto escolar tiene una función importantísima y de gran valor enmarcado en el Proyecto Educativo de Centro ya que incide directamente en aspectos tales como:

  • Tratamiento de la interdisciplinariedad desde una gran variedad de materias y a través de los Planes y Programas que se trabajan en el centro como son Plan de Igualdad entre Hombres y Mujeres, Bilingüismo, Comunic@, Plan de Lectura y Biblioteca, Plan de Transformación Digital Educativa (TDE), Forma Joven, el Programa Sentir y Vivir el Patrimonio, Escuela: Espacio de Paz, Escuelas Deportivas, AulaDcine y Programa Aldea.
  • Concienciación a toda la Comunidad Educativa desarrollando este aspecto como objetivo que deberá tratarse a largo plazo ya que la toma de conciencia no es un proceso rápido, sino que debe evolucionar en un periodo razonable de tiempo.
  • Importante repercusión social ya que es imprescindible involucrar a toda la comunidad educativa y llevarlo a la vida real.
  • Fomentar una metodología participativa e innovadora creando actitud creativa, crítica y activa ante los problemas medioambientales de nuestro entorno más cercano.
  • Generar un único pensamiento de cuidado y protección del Medio Ambiente de forma consensuada.

Con todo ello se favorece el desarrollo de las competencias clave de nuestro alumnado y el trabajo en equipo con todos los sectores de la comunidad educativa, se crean redes para favorecer la difusión de todas las actividades que se realicen desde el proyecto, así como el desarrollo de metodologías activas e innovadoras. Además, intentamos generar un cambio en las conductas ecosociales que tanto afectan a nuestro entorno y, como docentes, hacer que todo esto incida en nuestra práctica educativa diaria.

10. RECURSOS PARA AVANZAR EN EL HUERTO

Para el profesorado que desarrollamos el proyecto de un huerto en los centros educativos, nos es de gran utilidad disponer de los boletines elaborados por Andalhuerto en los que dan a conocer las diversas experiencias de otros centros y ponen a disposición del público una gran variedad de artículos que son una fuente de información y de aplicación directa en el día a día del trabajo de huerto con nuestro alumnado.

11. RESUMIENDO…

El huerto escolar permite potenciar la equidad e inclusión educativa con el objetivo de que todo el alumnado alcance el máximo desarrollo personal, intelectual, social y emocional posible, además de establecer un marco para el debate y la reflexión conjunta, dirigidos a la promoción de buenas prácticas educativas y al aumento de colaboración con los agentes sociales y sanitarios para mejorar la atención al alumnado especialmente vulnerable.

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